NOVEDADES SOBRE EL ÚLTIMO GOBERNADOR BRITÁNICO DE LAS BERMUDAS

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Recientemente se ha podido investigar con los restos de los cuerpos enterrados junto al último gobernador británico, Bruerne (1764-1780), y se ha descubierto que todos murieron muy posiblemente de fiebre amarilla. El jefe de arqueólogos Fortenberry, indicó recientemente: “ Muy posiblemente su cuerpo debía haber sido trasladado a Inglaterra, pero por alguna cuestión nunca llegó a producirse y se consideró mejor enterrarlo bajo una capilla, algo inusual para un personaje inminente como Bruerne. Yo había pensado que recibiría por su cargo, un enterramiento ceremonioso, pero en ningún lado sale reflejado este acto. Su ataúd estaba desintegrado por el paso del tiempo y una plaquita interior que estaba en la tapadera con sus datos personales, acabó en medio de su caja torácica”.



Como ya indicamos el pasado mes, Fortenberry buscaba junto a su equipo, a otra personalidad inglesa, Sir Jacob Wheate, capitán del HMS Cerberus, navío de su majestad británica, hundido con 32 cañones al chocar con unas rocas en 1783. Sobre Wheate, Fortenberry aclaró que, como Bruerne fue enterrado en el mismo lugar. “Sabíamos por los registros históricos que Wheate murió de fiebre amarilla pero no se encontraba en el naufragio.

Su cuerpo se encuentra enterrado en un agujero dentro de la roca caliza, justo enfrente del púlpito y gracias a su plaquita con sus datos personales le hemos podido identificar.”



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